Hoy os quiero dar un poco más de
datos para distinguir en qué momento evolutivo se encuentran vuestros hijos y,
al final, proponeros una página web que podéis utilizar con vuestros hijos para
desarrollar su autoconocimiento de una forma lúdica.
En primer lugar, sabéis que, hasta
que el niño es capaz de percibirse a sí mismo (autoconocimiento), de
construirse una visión de su yo (autoconcepto) y de evaluarse (autoestima),
pasa por una serie de fases en la que la autonomía juega un papel primordial.
Según Sander (1962), estos son los períodos que el niño pasa antes de que se reconozca plenamente:
Al mismo tiempo, Bruner (1977) destaca tres etapas muy
interesantes en la construcción del personalismo. Si vuestros hijos están en la
etapa del oposicionismo, habréis observado que se dedican a decir que “no” a
todo. En cambio, si vuestros hijos se encuentran en la edad de gracia, os
habréis fijado que empiezan a ser conscientes de su identidad y todas las
frases que dicen empiezan con “yo…”: “Pues yo sé bailar”, “pues yo tengo un
coche muy grande”… Finalmente, si vuestros hijos están en la fase de la imitación,
veréis que son mucho más autónomos y que ya se diferencian de sus madres, por
ejemplo, porque las imitan pintándose y a vistiéndose como ellas.
Y después de todo esto nos preguntaremos:¿Cómo podemos contribuir los padres al desarrollo de esta percepción? Pues bien, la familia es el primer contexto de desarrollo donde el niño puede aprender a diferenciarse de los otros componentes familiares. Os voy a dejar una página web de una escuela que está llevando a cabo un proyecto llamado “Nos conocemos”, destinado a desarrollar el autoconocimiento de los niños del primer ciclo de Infantil. En esta página encontraréis actividades para hacer con vuestros hijos y unos vídeos muy divertidos del mono Bubba, que nos enseña canciones y diálogos sobre nuestro cuerpo, para que el niño empieze a distinguir, por ejemplo “mi nariz” de “la nariz de mamá”, “la nariz del mono Bubba”, etc.
¡Saludos
a tod@s!
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